Por Natalia Montes

En situaciones denominadas “anormales” y/o extremas por las cuales nos sorprendemos, los seres humanos inevitablemente accionamos y reacciones a nivel de supervivencia

En las circunstancias de pandemia, atravesamos una fuerte dicotomía entre el cuidado de la salud física y emocional. 

En este apartado, expondremos cómo ser inteligentemente emocionales para que sentimientos como la ansiedad por la incertidumbre que conlleva lo desconocido, el miedo a la pérdida de nuestros seres queridos, la tristeza, el enfado por no controlar la realidad o la impaciencia no nos perjudiquen en tiempos de Covid-19. 

El momento que estamos viviendo pone a prueba nuestra capacidad de comprometernos individual y colectivamente ante una amenaza común, y despierta la necesidad de que otras emociones resurjan: la esperanza, la confianza, la solidaridad, la empatía, la unidad o el apoyo.

La inteligencia emocional es la capacidad de reconocer nuestros propios sentimientos y los de los demás, de motivar y motivarnos, y de manejar adecuadamente las relaciones (Goleman,1995). Ésta se divide en dos competencias, de acuerdo a cómo nos relacionamos. Una es la competencia personal (yo), comprendida por la conciencia de uno mismo, reconocer y entender fortalezas y debilidades, emociones, impulso, cómo nuestras acciones repercuten en los demás, la autorregulación y automotivación; y otra competencia es la social (los otros), donde se engloba la empatía y el desarrollo de habilidades sociales.

Una persona emocionalmente inteligente es aquella capaz de gestionar satisfactoriamente las emociones para lograr resultados positivos en sus relaciones.


10 actividades para la inteligencia emocional

La clave es aprender a identificar, comprender y regular nuestras emociones. Y para hacerlo podremos poner en prácticas algunas actividades tanto en ambiente laboral, como personal:

1. Observar tus emociones, aceptarlas, no asustarse por sentirlas y compartirlas con los demás.
2. Revisar de qué manera afrontamos la situación de Covid-19. Es centrarse en lo que sí se puede hacer, y no en las restricciones.
3. Crear metas y objetivos que desees superar, en pequeñas acciones.
4. Humor, sonreír, visualizarse en recuerdos lindos, divertidos y agradables.
5. Establecer rutinas, planes diarios de actividades individuales y en familia dentro del hogar.
6. Continuar en contacto social telefónicamente, por videollamadas, WhatsApp, Zoom. No sólo para lo laboral, sino generar con dichas herramientas encuentros de ocio y distención.
7. Analizar minuciosa y objetivamente la información que tenemos a nuestro alcance sobre Covid 19, para no creer todo lo que leemos y no sobrecargarnos de información.
8. Fortalecer vínculos de relaciones dentro de las posibilidades y sus alcances.
9. Realizar una actividad física para despejar la mente y trabajar el cuerpo.
10. Cultivar la mente con acceso a cursos de interés, crearse, tener momentos artísticos.